El proyecto, ubciado en un edificio entre medianeras, consiste en la transformación de un dúplex en dos viviendas para dos parejas jóvenes
La condición principal del proyecto la establece la propia estructura del edificio. Los muros de carga son paralelos a la fachada, de modo que se crean dos crujías: una con mucha luz, que da a la fachada; y otra con poca iluminación natural, que da al patio de luces del edificio.4o
En base a esta condición, la decisión principal del proyecto consiste en ubicar los dormitorios y el baño en la crujía interior, convirtiendo la crujía de la fachada en un solo espacio destinado a las actividades diurnas: estar, comer, trabajar, estudiar y cocinar.
El bajo presupuesto ha determinado las soluciones constructivas adoptadas. Se ha elegido un solo material -el microcemento blanco- como solución de revestimiento para todas las estancias, al mismo tiempo que se han optimizado los elementos de carpintería interior, de manera que solo hay un único elemento de carpintería, que alberga las puertas del lavadero, el baño y un pequeño armario para el vestíbulo.
Por lo tanto, se confía en que el carácter de las viviendas no surgirá de la arquitectura, neutra y blanca, sino más bien de la vida y de los objetos que contiene. En este sentido, el proyecto actúa como una caja que guarda lo fundamental, es decir, las vidas y las historias personales de quienes habitan los espacios de la casa.